Bájate del árbol, no eres tú, es contra Kakast
Abandonamos las ciudades porque es en la tierra donde sentimos que podemos hacer un aporte en cuidado, protección y resistencia. Pero nos están matando y llenando de miedo y la probabilidad de que sea presidente un fascista homofóbico racista, un nazi al fin, nos hace por primera vez cuestionarnos el hecho de votar para que no salga… Y es tristísimo tener que apoyar a un amarillo hipócrita: “el mal menor"