Feminismo autónomo

El feminismo autónomo en América Latina y El Caribe ha sido una corriente política construida desde colectivas de base que nada tiene que ver con las ONGs feministas. Al contrario ha sido una corriente que ha denunciado la oenegización de los movimientos sociales y entre otros principios irrenunciables, se ha opuesto a la militancia partidista en el feminismo. En chile ha encarado y denunciado a un feminismo que se inscribe en el silencio ante la criminalización, persecución y prisión política en la postdictadura y el continuismo del pinochetismo en el orden económico, judicial, etcétera

Entrevista a Margarita Pisano*: “¿Tú crees que sacarás algo de aquí…?”

subraya fragmentos de una historia feminista latinoamericana como la denuncia de “Cómplices” de Brasil sobre la gestación del proceso de Beijing con la AID (American International para el Desarrollo), la misma que indujo programas de esterilización forzada a mujeres. Una AID íntimamente relacionada con la política exterior de EE.UU. y de la cual era consultora la feminista Gina Vargas, que Pisano nombra como “encargada de llevar las políticas de la AID, a Beijing”. Y no deja de ser relevante este fragmento neoliberal de la historia feminista ya que a más de 25 años, hay feministas chilenas que pretenden la figura de Vargas como “autónoma”, lo que suena –al menos- sorprendente.

Feministas Autónomas en Chile No se reconcilian y los abusos siguen

Feministas autónomas como Bataszew y Aldunate también luchan contra la revictimización de las sobrevivientes de la dictadura. “Nosotras discrepamos que seamos miradas como ‘víctimas,’ como ‘pobrecitas,’” Bataszew dice. “Nosotras—las que luchamos contra la dictadura—teníamos visiones del mundo, teníamos proyectos políticos, queríamos cambiar radicalmente el sistema, no solo a Pinochet, por un sistema no capitalista.”

La disputa por “El feminismo”

El feminismo” mixto y heterosexual, no quiere aceptar la memoria de un feminismo que confronta al Patriarcado como sistema político y que NO nombra al machismo, la lesbofobia, la homofobia, la transfobia como “cultura”, “inequidad”, “falta de oportunidades”, “discriminación”. Todos aquellos conceptos que como “diversidad”, le son tan saludables al capitalismo neoliberal y (neo)colonial, porque son y se quedan en la superficie.

LAS ENFERMAS DE JUSTICIA

Esto es necesario, sobre todo desde donde y quienes nos estamos pensando propuestas psicoterapéuticas desobedientes de la hegemonía médica, porque urge dar la vuelta a las nociones de salud y a las de enfermedad y señalar el contenido político de los diagnósticos, hoy legitimados por cierta noción de ciencia que se presume neutral y apolítica, pero, que como he señalado, responde a intereses concretos.

Contención y autoapoyo en Estados de Emergencia

Será importante y es el primer paso, conversar con quien se inquieta por la situación de otra. Ella puede estar nerviosa o sentirse traicionando la confianza de su amiga, madre, hermana, conocida; puede estar alarmada, sorprendida, extrañada, e incluso enojada con la víctima y juzgarla. Es muy importante la manera en que recibimos a esta persona ocupada de otra desde sus temores y prejuicios, no juzgarla por sus sentimientos (sean los que sean): el centro es la víctima y ella la que informa, agradecerle por esa solidaridad no es malo. La informante también está resintiendo la situación, se estresa, se conmueve, se ha sentido impotente. Por otra parte aclararle que lo primero que tiene que pasar, para resolverlo, es que la víctima llegue a aceptar el apoyo, y que esto es un proceso en el que ella puede acompañarle mucho, pero sin juicios o presiones

ANÁLISIS DE PANDEMIAS: ¡NO NOS VAMOS A CALLAR!

En esta crisis de aislamiento social y secretismo en torno a la realidad política-fenomenológica del COVID 19, lo seguimos haciendo por medio de plataformas en línea (virtuales), lo que nos ha mostrado limitaciones, pero así mismo posibilidades de llegar a compañeras que están en aislamiento, cuarentena o simplemente alejadas territorialmente, por medio de los teléfonos y los minutos (de redes sociales) a los que hemos tratado de acceder, con los que hemos buscado aportar a las compañeras y a la red de terapeutas para el apoyo feminista mutuo.