Violencia contra las Mujeres

La crisis “feminista” de Boric

La vocera Camila Vallejos se permitió presentar la incontinencia verbal de Boric como “transparencia y honestidad” y con la escasa expresividad que la caracteriza, se le observó conmovida, ya sea por miedo al desastre o simplemente por la costumbre femenina de justificar a los hombres... Son pródigas las muestras simbólicas y concretas de este círculo de protección feminista a Boric y su gobierno. Cabe recordar que a los 50 años del Golpe cívico militar en Chile (2023) “voceras del feminismo institucional convocaron a una performance” para abrazar y acordonar La Moneda , buscando -al parecer- demostrar que ante la lucha derechista constante por la “alternancia”, ellas defienden al gobierno de Boric.

Bernardita, mujer williche, madre pobre: la mató la institución

CHILOÉ, BERNARDITA MENDOZA ANTIMÁN, WILLICHE, TENÍA 31 AÑOS, ESTABA PRESA, INJUSTAMENTE IMPUTADA Y CON PRISIÓN PREVENTIVA.
EL SISTEMA JUDICIAL LA EXPUSO A SER VIOLADA, GOLPEADA, HOSTIGADA; LA JUZGÓ DE MANERA MISÓGINA.
ERA JOVEN, POBRE, MADRE, MAPUCHE Y MUJER.
LA FAMILIA NO HA TENIDO ACCESO A ALGÚN INFORME DE AUTOPSIA, DICEN QUE SE SUICIDÓ EN EL COMPLEJO PENITENCIARIO "ALTO BONITO" DE PUERTO MONTT.
SUS DERECHOS HUMANOS, LOS DE SUS HIJOS E HIJAS Y FAMILIA ESTÁN SIENDO VIOLADOS POR LAS INSTITUCIONES DEL ESTADO.

Si eliminan la Violencia Contra las Mujeres, se autodestruyen, no pueden… (nosotras sí…)*

Si el feminismo, ahora “los feminismos” reculan de sus políticas radicales de redistribución de los tiempos, los territorios, la riqueza, los recursos, los espacios cotidianos, y se quedan solo con estas políticas de reconocimiento a las identidades que implican visibilización cual publicidad de multinacionales, el feminismo se convierte en un  fetiche estético y en una usanza performática.
Para eso la postmodernidad neoliberal entrega cuotas de poder a determinadas mujeres para vaciar el feminismo.
Lo hace con las que cultivan más poder alineándose con ideas masculinas hegemónicas y con movimientos mixtos en que la hegemonía es masculinizada.

LAS ENFERMAS DE JUSTICIA

Esto es necesario, sobre todo desde donde y quienes nos estamos pensando propuestas psicoterapéuticas desobedientes de la hegemonía médica, porque urge dar la vuelta a las nociones de salud y a las de enfermedad y señalar el contenido político de los diagnósticos, hoy legitimados por cierta noción de ciencia que se presume neutral y apolítica, pero, que como he señalado, responde a intereses concretos.