Si eliminan la Violencia Contra las Mujeres, se autodestruyen…*
La Violencia contra las Mujeres es permitida, aunque esos estados e instituciones digan que tienen políticas de género e incluso si nos entregan un relato “feminista”. Los pactos patriarcales siguen siendo metaestables, susceptibles de transformarse continuamente para adaptarse y existir sin alterar en lo estructural sus formas de dominación. Como dice Hanna Arendt, la Violencia no es la interrupción de la Historia, es la Historia, y siempre tiene nuevos dispositivos como todas aquellas oficinas, privadas o públicas, que actualmente no se hacen responsables de nada de lo que sucede a las mismas ciudadanas a las que acuden en etapas eleccionarias.