DENUNCIA PÚBLICA CONTRA EL DEPREDADOR SEXUAL «LITO»
Nos dirigimos a la opinión pública particularmente de Cuba, Chile y Francia.
Este individuo no dudó en violar a Tania, incluso en presencia de su propia hija de 2 años. Las agresiones sexuales fueron reiteradas y peor aún, se repitieron en Francia (Paris) cuando Tania tenía 13 años, durante un viaje que él realizó a ese país.
DENUNCIA PÚBLICA
Contra Manuel Fuenzalida, también conocido como Lito, por agresión sexual reiterada.
Somos la familia y amigos de Tania Montecino Fariña y nos dirigimos a la opinión pública, particularmente de Cuba, Chile y Francia, para dar a conocer y denunciar a Manuel Fuenzalida Navarrete por haber agredido sexualmente a Tania, nuestra hija, sobrina, prima y nieta de manera reiterada, mientras ella era aún una niña de escasos 12 años.
Muchos de ustedes conocen nuestra historia familiar en la zona penquista, saben que durante la dictadura de Pinochet luchamos para derrotarla; en este contexto, Tania sufrió la represión de la tiranía, desde su nacimiento. Ella vivió la represión en carne propia al ser secuestrada por la CNI, junto a sus padres cuando sólo tenía 18 meses de edad y luego cuando debió vivir el encarcelamiento de su padre como preso político durante más de 4 años.
Ella partió al exilio a Francia junto a su madre y hermano, cuando tenía 7 años. En Francia, sufrió un grave accidente a los 11 años, que la dejó con secuelas físicas de por vida.
Luego de cirugías y terapias en Francia, sus padres decidieron llevarla a Cuba para que continuara la rehabilitación. Gracias a la solidaridad del generoso pueblo cubano pudo ser atendida por los mejores especialistas en rehabilitación infantil de La Habana. Ella permaneció en Cuba desde febrero a agosto de 1998.
Sus padres la confiaron a una familia chileno-cubana que tuvo a bien albergarla en su casa y que se comprometió a prodigarle todos los cuidados que necesitaba mientras durara su permanencia en la Isla, por razones obvias sus padres no podían permanecer en ese país. El trabajo de ambos y además su madre debía ocuparse de su hijo pequeño.
De igual forma, es importante decir que existía una confianza plena con el hoy denunciado a quien conocemos desde hace muchos años, como militante del partido comunista de Chile, en esa época, miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez y Preso político, fugado de la cárcel Pública de Santiago en 1990, exilado en Cuba, donde reside hasta el día de hoy.
El citado Manuel Fuenzalida, Lito, utilizando esa confianza violó a Tania en reiteradas oportunidades durante su estadía en La Habana, cuando ella sólo era una niña. Estas agresiones sexuales consistieron en violación sexual de distinta índole, la que comenzaron a las pocas semanas de haber llegado a Cuba.
Este hombre, un depredador sexual, era terapeuta de Tania, ya que se dedica a la fisioterapia y aprovechó cada momento a solas con ella para violentarla sexualmente y obligarla a realizar actos que atentaron contra su indemnidad sexual, su normal desarrollo infantil, que además le ocasionaron graves secuelas, con las que tiene que lidiar hasta el día de hoy.
Tania tenia apenas 12 años, se encontraba además imposibilitada de oponer cualquier resistencia debido a su situación de discapacidad.
Lito Fuenzalida, creo las condiciones para agredir a Tania al asegurarse de estar a solas con ella, el suplicio de la niña duró meses y en total impunidad.
Este individuo no dudó en violar a Tania, incluso en presencia de su propia hija de 2 años. Las agresiones sexuales fueron reiteradas y peor aún, se repitieron en Francia (Paris) cuando Tania tenía 13 años, durante un viaje que él realizó a ese país.
El aprovechó la condición de niña de Tania y también de la fragilidad física y psicológica. Otra situación de la que Fuenzalida hizo caso omiso fue dar por los suelos con la confianza que depositaron sus padres en él, ya que se trataba de un “compañero” de lucha, desde la juventud y “amigo” de años de la familia.
Hoy con mucho valor Tania se decidió a revelar estos ataques proferidos por parte de Manuel “Lito” Fuenzalida, siendo ya adulta y teniendo formación de psiquiatra.
Ella ha cargado con el peso de estas agresiones durante casi 25 años. El sufrimiento silencioso y las secuelas psicológicas han privado a Tania de una vida plena, mientras que su agresor pudo formar una familia, trabajar, vivir una vida apacible profitando de la solidaridad internacional del pueblo cubano y de todos quienes lo veíamos como un “buen compañero”.
Pero Tania, en cambio, la vida ha sido cargar con el peso de la vergüenza, lidiar con cuadros depresivos que la llevaron incluso a ideas suicidas; este hombre infame la sumió en la culpa, como suelen hacer los violadores, los pedófilos y en general, los abusadores.
A pesar de todo Tania logró sobrepasar sus miedos y angustias para relatarnos todos los hechos de que fue víctima.
Ella ha demostrado valentía y dignidad admirables escribiendo una carta pública de denuncia en sus redes sociales.
Como familia y cercanos a ella aún no salimos de la consternación, intentando digerir estos atroces delitos cometidos por Lito en contra de nuestra Tania. Y nos preguntamos ¿Cómo una persona con formación política que se supone defiende ideales progresistas, que se dice revolucionario, que pregona el altruismo del “hombre nuevo”, padre de familia, pudo cometer estos horribles actos?
Apoyamos esta denuncia hecha por nuestra Tania y por las otras posibles víctimas, pasadas, actuales y esperamos no futuras, de este violador.
Este delincuente sexual no solo dañó para siempre a una niña, sino que con sus actos criminales atentó contra la integridad del núcleo familiar de Tania.
Resulta particularmente repudiable haber atacado a una niña inválida, es decir, a quienes con mayor celo debiésemos proteger.
Creemos que traicionó a su organización, a quienes le admiraban, que traicionó los valores y principios humanistas y, en definitiva, con sus actos dañó a la sociedad entera.
Por Tania, por los niños, niñas y mujeres víctimas de violencias sexuales repudiamos los ataques sexuales cometidos por Manuel Lito Fuenzalida, hacemos un llamado a repudiar compartiendo esta declaración.
¡Estos actos deben ser condenados públicamente!
Como Tania, estamos convencidas, convencidos de que la vergüenza debe cargarla el agresor y nunca más la víctima.
TODOS/TODAS SOMOS TANIA
TODOS/TODAS ESTAMOS CON TANIA